Desde entonces Pepa ha estado en una casa de acogida, viviendo en el campo, de eso hace ya un año.
Pepa tiene casi tres años, está sana, le encantan los niños y pasear por el campo. También se echa sus buenas siestas en el sofá dentro de casa. Es una perra cariñosa y activa.
Pesa 45 kilos, está esterilizada y con las vacunas al día. Se encuentra en Sevilla pero puede viajar.